Estamos seguros de que a ti también te pasa. Lees o escuchas términos poco familiares que, supuestamente, tienen un impacto (positivo o negativo) en tu vida… Te preocupan o interesan, pero en realidad no sabes muy bien a qué hacen referencia o porqué te tienen que importar.
Y aunque nos encantaría explicártelo todo y darte el conocimiento absoluto sobre todas las cosas del universo, nos comprometemos a hablarte solamente de lo que tengamos idea o, mejor dicho, seamos auténticos eruditos. Bromas aparte, en el blog Garlanda queremos compartir información seria, contrastada e interesante de una forma entretenida y comprensible. ¡Así que empezamos!
Has leído unas cuantas veces en nuestra web el acrónimo COVs y el concepto al que hace referencia, compuestos orgánicos volátiles (en inglés VOC o volatile organic compounds). Ahora bien, ¿qué son y por qué me tienen que importar?
Son compuestos químicos de carbono en combinación con hidrógeno, oxígeno, flúor, cloro, bromo, azufre o nitrógeno y que se encuentran en estado gaseoso a temperatura ambiente. Como consecuencia, entran en contacto con el aire y pueden ser inhalados con facilidad.
Existen más de mil (aquí puedes ver el listado completo), pero los más habituales y que podrían sonarte son: metano, tolueno, butano, benceno, propano, formaldehído, acetona y percloroetileno.
Los componentes orgánicos volátiles pueden ser de origen natural (descomposición de materia orgánica, incendios forestales o emisiones de plantas y animales) y llegar a jugar un papel beneficioso en la comunicación vegetal, siendo los principales responsables de los olores que desprenden algunas plantas. Sin embargo, la mayoría son dañinos para el medio ambiente y para nuestra salud.
Como suele ser habitual, gran parte de la producción de COVs perjudiciales deriva de la actividad humana:
Fuentes en el exterior:
🏭 Emisiones de la industria
Fuentes en el interior:
🪑 Mobiliario
🚜 Pesticidas
🦨 Ambientadores
💅 Cosméticos y desodorantes
Como puedes deducir de la lista anterior, el aire del interior de nuestras viviendas puede estar hasta 10 veces más contaminado que el de fuera. La entrada principal de los COVs en nuestro organismo es a través del sistema respiratorio, pero también puede producirse por la piel, los ojos o por ingesta. Su nivel de afectación a la salud depende de la concentración y del tiempo de exposición, así como de las características de cada COV en particular.
Fuente: LDX Solutions
Pueden provocar efectos adversos como irritación de ojos, nariz y garganta, dolores de cabeza, alergias e incluso pueden dañar el hígado, los riñones y el sistema nervioso central.
Por todo ello es tan importante minimizar el uso de productos fabricados con químicos altamente contaminantes y centrarse en los que colaboran en crear un ambiente interior más sano.
Para que te hagas una idea, en el caso de las pinturas, existe la idea preconcebida de que sólo se liberan compuestos orgánicos volátiles durante su aplicación y tiempo de secado (lo que normalmente asociamos al olor). Sin embargo, existen estudios que demuestran que pueden continuar emitiéndose a lo largo de los años… mientras tú, inocentemente, piensas: ¡Qué bonito es el color de mi pared! Como primer paso para minimizar su concentración en el interior de tu hogar, en Garlanda te damos dos consejos muy fáciles: escoge una pintura libre de COVs y ventila a menudo las diferentes estancias.
¿Te parece interesante? Échale un vistazo a nuestro catálogo de pinturas.
